385 Grados / Tetlanohcan / REDACCIÓN / Habitantes del Barrio de Dolores Aquiahuac señalaron a la presidenta municipal de Tetlanohcan, Kritsbey Pérez Flores, por presuntamente actuar de manera autoritaria al intentar ejecutar un proyecto municipal sin consultar previamente a la población ni respetar el uso legal de un inmueble comunal.
De acuerdo con vecinos organizados, el conflicto se originó por la intención del ayuntamiento de instalar la denominada “Sala Inmersiva del Agua” en la Casa de Piedra, inmueble que actualmente alberga la biblioteca pública del barrio. Los inconformes aclararon que no se oponen al desarrollo ni a proyectos educativos, pero rechazaron la forma en que se pretende llevar a cabo la obra, al considerar que se realizó sin diálogo, sin consulta ciudadana y fuera del marco legal.
Los pobladores señalaron que la biblioteca forma parte de la Red Nacional de Bibliotecas, por lo que su reubicación o cambio de uso requiere autorizaciones específicas. Además, destacaron que el inmueble es patrimonio comunal, por lo que cualquier modificación sin el consentimiento de la comunidad podría constituir un abuso de poder.
Los hechos se intensificaron el pasado 19 de diciembre, cuando ciudadanos acudieron a manifestar su inconformidad y, según denunciaron, fueron agredidos y amenazados por trabajadores del ayuntamiento. En redes sociales circulan videos que documentan los momentos de tensión, los cuales, aseguran los vecinos, evidencian un uso excesivo de la fuerza y la falta de disposición al diálogo por parte de la autoridad municipal.
Los habitantes acusaron que, tras los hechos, la presidenta municipal intentó desacreditarlos públicamente al calificarlos como opositores al progreso, cuando —afirman— su exigencia se limita al respeto de la legalidad, los bienes comunales y la participación ciudadana en las decisiones públicas.
Finalmente, los vecinos hicieron un llamado a que las autoridades municipales transparenten sus decisiones, respeten el marco legal y garanticen que los bienes comunales no sean utilizados de manera arbitraria. Reiteraron que Tetlanohcan requiere desarrollo, pero con consenso social y respeto a la voluntad de la comunidad.
