385 Grados / Tlaxcala / REDACCIÓN / Este 6 de agosto, activistas del Movimiento Animalista de Tlaxcala salieron a las calles de la capital para exigir justicia y respuestas inmediatas ante el operativo realizado el día anterior, en el que se capturaron perros en situación de calle de manera violenta y sin protocolos adecuados. La marcha, pacífica pero contundente, reunió a defensores de los derechos animales que condenaron la falta de transparencia y el uso excesivo de la fuerza por parte de autoridades municipales.
Los colectivos denunciaron que las acciones ejecutadas por el municipio de Tlaxcala y el Centro Antirrábico de San Pablo Apetatitlán constituyen un acto de crueldad institucional. Rechazaron que se recurra a la violencia para tratar la problemática del abandono animal, y exigieron conocer el paradero y estado de salud de los ejemplares capturados. Subrayaron que la eutanasia no es una alternativa ética ni legal para abordar esta crisis.
Entre sus exigencias destacan la destitución inmediata del encargado de Bienestar Animal del municipio, así como de la responsable del Centro Antirrábico, por permitir prácticas que consideran inhumanas. Además, reclamaron la aplicación del Reglamento de Bienestar Animal —ya aprobado por el Ayuntamiento pero no implementado— y la conformación de una Comisión de Bienestar Animal con participación de expertos, sociedad civil y colectivos animalistas.
Los manifestantes hicieron un llamado directo al presidente municipal Alfonso Sánchez García para que asuma su responsabilidad como autoridad y brinde explicaciones públicas sobre lo ocurrido. Consideraron inadmisible su falta de pronunciamiento ante un tema que ha generado indignación ciudadana. Con pancartas y consignas, reiteraron que la lucha por el bienestar animal continuará hasta lograr cambios reales en las políticas públicas y garantizar una vida digna para los animales en situación de calle.
