*Los partidos de oposición han mantenido un silencio sepulcral.
385Grados / Nacional / REDACCIÓN / Tras haber declarado culpable por narcotráfico al ex secretario de Seguridad de Felipe Calderón, Genaro García Luna, por una corte de los Estados Unidos y a la espera de condena, es momento de analizar las reacciones y los escenarios que se empezaron a configurar con este hecho.
Mientras que la oposición PRI-PRD han mantenido un sepulcral silencio desde el momento en que estos hechos se dieron a conocer, por otra parte el partido en el poder celebra: el PAN, su principal oponente, en una declaración desesperada ha tratado de desvincularse de estos personajes, pero lo que ha demostrado es que se encuentra en un momento de profunda crisis y se muestra como lo ha dicho en reiteradas ocasiones: «moralmente derrotado» en un país donde precisamente la moral y la ética, por fin, son parte del debate político entre la ciudadanía.
Por otra parte de los primeros en señalar esto, fue el secretario de Gobernación, Adán Augusto López, quien sin temor ni falta de argumentos ya señalaba a García Luna y al mismo Felipe Calderón como delincuentes.
Ahora, que al menos uno de ellos oficialmente pasará años en una prisión, le debemos dar la razón al presidenciable tabasqueño, quien, a diferencia de las otras corcholatas, cobra un justo protagonismo en la coyuntura política nacional más importante.
